—
Noche, ¿qué haces?
—
Pinto.
—
Ya.
—
¿Entonces?
—
Quiero entender por qué
mezclas esos barcos tan académicos con esas nubes tan pop.
—
¿Así que tú también te has
dado cuenta?
—
No entiendo…
—
Es una broma. Profe, me gusta
pintar barcos veleros. Y también me gusta pintar cilindros de colores. A veces
no es fácil decidir dónde meterlos, pero, habiendo nubes, es obvio.
—
Noche, cómo te envidio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario