—
¿Por qué el espejo cambia la
derecha por la izquierda?
—
Porque externamente somos
aproximadamente simétricos respecto de un plano vertical que nos parte por la
mitad: por eso podemos imaginarnos ocupando el lugar de nuestra imagen. Pero,
al hacerlo, damos media vuelta y cambiamos la izquierda por la derecha. Si la
simetría fuese horizontal…
—
Ya. Otra cosa que no
entiendo: ¿por qué mi copia parece estar al otro lado del espejo?
—
Porque el tamaño del reflejo
equivale al tamaño relativo de un gemelo que estuviera al otro lado y a la misma
distancia.
—
No lo entiendo: si el espejo
se limita a reflejarnos, deberíamos vernos más cerca, como si la copia
estuviese en el propio cristal.
—
Pero no es así: mide el
reflejo de tu cabeza en el espejo con los dedos.
—
Medirá lo mismo.
—
Prueba.
—
¡Es muy pequeña!
—
Exactamente la mitad.
—
Qué genial. Seguro que sabes
más trucos...
—
Mientras te miras en el
espejo, mueve los ojos en todas las direcciones: yo veré cómo mueves las
pupilas, pero tú no podrás ver su movimiento.
—
Wow.
Noche se mira y remira en el espejo, pone
gestos, cierra los ojos hasta convertirlos en dos rendijas.
—
El espejo, ¿qué refleja?,
¿solo la luz?
—
Cierto espectro de ondas
electromagnéticas.
—
Y tienen que ir y venir…
Quiero decir… Estoy viendo mi imagen ahí, en el espejo, pero lo que veo es una
imagen que ha tenido que salir de mí, rebotar en el cristal y volver hasta mis
ojos.
—
Sí: Lucrecio explicaba…
—
Es decir, que no me veo como
soy sino como era hace una fracción de segundo.
—
Sí…
—
Y en cuanto más lejos esté
del espejo más antigua será la imagen que vea —dice Noche mientras se aleja del
espejo caminando hacia atrás hasta dar con la librería—. Entonces, si en alguna
estrella lejana un espejo está apuntando hacia mí, podría devolverme imágenes
de mi pasado. De hecho, podríamos estar recibiendo imágenes así constantemente.
¿Sabes?, creo que debería haber millones de espejos repartidos por el cosmos
para preservar el pasado. Cada civilización debería construir grandes espejos
que apuntasen en todas las direcciones del espacio para devolverle sus recuerdos
a las demás civilizaciones. Solidaridad galáctica. O intergaláctica. ¿Te
imaginas? Lo que no entiendo es que no tengas un telescopio con lo científico
que tú eres. Yo pensaba que todos los científicos teníais uno. Me apetecía
ahora ponerme a buscar espejos entre las estrellas.
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